viernes, 2 de septiembre de 2011

Un Fernet y dos birras



Dale, vamos. Vos seguime a mí que algo levantamos. Y si hay que bailar, bailamos que las minitas te imaginan cogiendo cuando bailás. ¿Sabías eso vos? Me lo dijo una mina. Ya sé que ninguno de los dos baila bien, pero vos seguime a mí. Hacete el boludo y mirame como muevo los pies y tratá de copiarme. Yo le hago un poco más que vos. El secreto es mostrarse seguro, saber lo que uno hace, porque sino, la minita se da cuenta que estás nervioso y se pincha todo. Con confianza que algo levantamos. Las minitas de acá son re fáciles. Mirá la camisa que me puse. Me la prestó mi viejo. Me queda un poco grande pero zafa, ¿no? Está buena tu remera. Ya sé que es la de siempre, pero sirve para el chamuyo. Le entrás por el lado de la música. Yo me levanté un par de minitas charlando sobre la banda de mi remera. Con la de Los Piojos me levanté dos, pero con la de La Renga me la levanté a la Fabi. Doblemos acá, que tengo que comprar cigarrillos. Ella pasó por donde yo estaba y me dijo: “Eh, aguante La Renga” y siguió para el baño así que fui a esperarla. Me mandé, nomás. Porque si la pensás no la hacés. Y la encaré. Hablamos de música y nos tomamos un par de birras. Culeamos en la costa y de ahí nos empezamos a ver. Pero después, no sé cómo, se enteró Fer. Para mí algo boconeó Javi. Porque él estaba el día que yo se lo conté a Nacho en tu casa, ¿te acordás? Para mí que fue el puto de Javi. Pará que compre puchos. Hola, ¿me das un Filip? No, no tengo monedas. Bueno dame caramelos… O estos, ¿cuánto salen? No, mejor dame caramelos. Cualquiera… o los Palitos de la selva, mejor. Ahí tá, gracias. Agarremos por esta que es más corto. Por eso te decía el otro día, cuando me hablabas de la Juli. Porque estaba Javi y ese chabón es re chusma, loco. No hay que darle mucha bola a ese. Seguro va a andar por ahí, pero nosotros hacemos la nuestra, nomás. ¿Vamos a fumar algo a la plaza? Si la noche está tranqui. Vení, vamos a sentarnos allá, atrás de los pinos. Acá no pasa nada. Tomá, prendelo vos. Raúl preguntó por vos el otro día. No, estuvimos chateando. No, yo tampoco lo vi más. Anda re perdido. Che, yo tengo cuarenta mangos, nomás ¿Vos cuánto tenés? Bueno, nos alcanza un Fernet y dos birras. Vemos cómo la estiramos. Vas a ver, algo vamos a levantar… El otro día me acordé de cuando te caíste en el cumpleaños de Julio. ¿Te acordás? Terrible golpe te diste. Está bueno. Me lo pasó Fer. Estuvo re bueno ese cumpleaños. Terminamos todos re en pedo. Guillermo vomitó todo el césped y Julio lo quería matar, ¿te acordás? Yo me agarré a Daiana, pero solo tranzamos. Che, vamos. Guardemos un poco para la salida. Vamos por allá y de ahí quedan dos cuadras. Vamos a tener que caretearla en la entrada. Vos seguime a mí. Nos hacemos los boludos. ¿Trajiste documento? Sí, boludo, hoy algo levantamos. Mirá esa minita, la de blanco. Terrible, ¿no? Vení, entremos… 

Y entraron.

1 y 2 de septiembre de 2011

3 comentarios:

  1. q bueno! decidi empezar a ponerme al dia con tus escritos je.
    Me gusto mucho, pareciera el capitulo de un libro.. capas le vendria bien una continuación..
    besos y abrazos!

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  2. Agus! a lo mejor viene una continuación... nunca se sabe! Me alegra que te guste y que quieras ponerte al día =) Besos!

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  3. es interesante el relato, y deja con ganas de mas.

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